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Cómo gestionar tu tiempo cuando eres un creativo (y tienes mil proyectos en mente)

Cómo gestionar tu tiempo cuando eres un creativo (y tienes mil proyectos en mente)

El tiempo siempre parece ser el enemigo, especialmente cuando eres creativo y tienes mil proyectos rondando en tu cabeza. Y es que, ¿quién no ha experimentado esa sensación de querer abarcarlo todo y al final sentirse atrapado entre tantas ideas?

Pero, ¿y si te dijera que hay una forma de hacerlo sin perder la inspiración, sin ahogarte en la ansiedad de la agenda y aún así avanzar en todo lo que quieres hacer?

Aquí te cuento algunos métodos que pueden ser clave para mantenerte organizado sin perder tu esencia creativa.

1. El time blocking: ponle horario a tu creatividad

¿Te suena la idea de tener todo tu día dividido en bloques de tiempo específicos para cada tarea? A primera vista puede sonar rígido para un creativo, pero el time blocking puede ser la clave para no dispersarte. La creatividad no tiene que estar a merced de la urgencia del momento. Si te dedicas bloques específicos para tu proyecto personal, otro para tus proyectos laborales, y uno más para descansar o desconectar, te garantizo que sentirás que el caos disminuye.

¿Cómo hacerlo?

  • Define bloques de 30 a 90 minutos, según lo que aguante tu concentración.
  • Respeta esos tiempos: cuando llegue el momento de cambiar de actividad, hazlo. Esto ayudará a mantener el foco.
  • Entre bloques, date 10-15 minutos para relajarte, estirarte o simplemente desconectar.
    • Y recuerda, no tiene nada de malo que esos 15 minutos se conviertan en 30 minutos de descanso. Lo importante es ser consecuente con tus energías, pero apuntar a dar tu máximo cuando estés trabajando en tus proyectos creativos.

De esta forma, no solo gestionarás tu tiempo, sino que también te asegurarás de que cada proyecto tenga su espacio sin quitarle protagonismo al resto de tus ideas.

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2. La regla del 80/20: prioriza lo que realmente importa

El principio de Pareto, o regla del 80/20, te dice que el 80% de tus resultados provienen del 20% de tus esfuerzos. Esto es oro puro cuando tienes demasiados proyectos en mente.

¿Cómo aplicarlo?

  • Haz una lista de todos tus proyectos y tareas.
  • Identifica qué actividades te están generando el mayor impacto (aunque no sean las más urgentes).
  • Enfócate en ese 20% que realmente aporta a tus objetivos a largo plazo, y pon el resto en segundo plano.

Así, en lugar de ahogarte con tareas que pueden no ser tan importantes, te centras en lo que realmente hará avanzar tus proyectos creativos.

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3. Usando Trello para organizar todo (sin perder inspiración)

Ahora, sé que cuando tienes mil ideas, puede ser difícil no perderse entre tantas. Aquí es donde Trello entra en acción, esa herramienta tan visual y amigable para gestionar proyectos.

¿Por qué me gusta Trello para la gestión de proyectos creativos?

  • Visual y flexible: Puedes organizar tareas de manera que las veas de forma clara, sin perderte entre un mar de listas.
  • Tableros personalizados: Crea tableros para cada proyecto y dentro de esos tableros, listas con tareas que puedas mover de una columna a otra según su avance.
  • Prioriza visualmente: Usa etiquetas de colores para marcar lo urgente, lo importante y lo que puede esperar. Así, en vez de sentirte abrumado, puedes ver todo claramente.

Automatizaciones para simplificar tu trabajo

Trello también te permite crear automatizaciones a través de Butler, una herramienta integrada que facilita la gestión de tareas repetitivas y te ahorra tiempo.

  • Automatiza el movimiento de tarjetas: Si tienes tareas que se repiten constantemente, puedes configurar Trello para que las mueva automáticamente de una lista a otra según su progreso.
  • Asignación automática: Asigna tareas automáticamente a las personas de tu equipo según el tipo de tarea o el proyecto en curso.
  • Recordatorios automáticos: Establece notificaciones que te avisen antes de las fechas límite, asegurando que nada se quede atrás.

Permite entonces que las automatizaciones liberen tu atención de lo tedioso y sobre todo, funcionen para mantenerte en el curso que te planteaste.

4. No perder la inspiración: organiza sin agobiarte

Lo que distingue a los creativos es su capacidad de fluir en sus proyectos, pero también está esa presión de que el caos sea parte del proceso. La clave está en encontrar un balance. Aquí te dejo un par de consejos para organizarte sin perder esa chispa:

  • Divide el trabajo creativo en etapas: Cada proyecto puede tener su fase de ideación, desarrollo y finalización. Así, no te atasques en una fase demasiado tiempo.
  • Deja espacio para la improvisación: Aunque tus horarios y listas sean importantes, también date tiempo para la espontaneidad. Deja que tu mente se relaje y dé paso a nuevas ideas.
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5. La práctica constante: la clave para no agobiarte

Al final, la gestión del tiempo como creativo es una práctica constante. No se trata de tener todo perfecto, sino de avanzar. Recuerda, la rigidez (o el orden, en otras palabras) no tiene que ser enemiga de tu creatividad. Al contrario, cuando le das estructura a tu tiempo, permites que tu mente se concentre en lo que realmente importa: Crear.

A crear, entonces.


La idea de este artículo es que encuentres un camino donde puedas gestionar tus proyectos sin perder el foco ni la pasión que impulsa cada uno de ellos. Porque, al final, la organización no es solo una cuestión de productividad: es una herramienta para vivir de manera más libre y más auténtica.
Gastón Mera

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